André Carvalho es un arquitecto y diseñador que se dedica al diseño de muebles desde 2012. Comenzó su trayectoria en la universidad, tomando cursos de carpintería y experimentando extensamente en los laboratorios de FAUUSP, donde quedó fascinado con la posibilidad de dar vida a sus diseños e ideas.
Unos años antes de graduarse, se asoció con dos amigos de la universidad y comenzó a hacer algunos proyectos de carpintería para amigos y familiares. En un almacén alquilado en Vila Anglo, São Paulo, con maquinaria básica, el enfoque estaba puesto en diseñar y producir muebles con sus propias manos. El acto de fabricar siempre fue el interés central y la participación en todo el proceso fue fundamental.
El trabajo empezó a dar sus frutos y así nació Farpa, donde André y sus socios diseñaron y produjeron muebles y objetos durante más de ocho años.
En 2022, André comienza a dedicar más energía y foco al diseño y desarrollo de nuevas piezas, firmadas únicamente por él. El deseo de dedicarse más intensamente al diseño de muebles, investigar nuevos materiales y lograr una producción más eficiente es lo que impulsa esta nueva etapa, sin dejar atrás la experiencia de trabajar en el taller durante estos años.
La experiencia de estar en contacto directo con la producción de las piezas guía e informa los nuevos diseños, que siempre se basan en las posibilidades de producción, con un gran respeto por las materias primas y hechos para durar.
Además de funcionalidad, comodidad y durabilidad, conceptos esenciales en su producción, André pretende que sus piezas promuevan la creación de vínculos emocionales y poéticos con los usuarios.
La mayor parte de su producción se subcontrata a talleres y fábricas en São Paulo. En su taller, ubicado en Botucatu, São Paulo, donde vive, André crea prototipos de las piezas y realiza pruebas de desarrollo, además de producir piezas personalizadas y proyectos especiales.
Uno de los sueños de André siempre ha sido combinar y unir el trabajo del diseño y la carpintería con la arquitectura. En 2023, André firmó su primer proyecto y comenzó a perseguir cada vez más esta unión.
“Los conceptos son los mismos: respeto por las materias primas, por quienes trabajan con ellas, construir vínculos emocionales a través de los objetos y espacios construidos y producir cosas que duren mucho tiempo; lo que cambia un poco es la escala y el tiempo que tarda cada cosa en suceder”.